Mi primera vez en un círculo de hombres me di cuenta de que tenía mucho que sanar. Juzgaba mucho a mi padre y supongo que era porque mi madre me había estado diciendo toda la vida que no tenía que ser como él.

En la televisión hablaban todo el tiempo de hombres violentos, de asesinos, de maltratadores. “¿Será que no hay hombres buenos?” Me preguntaba yo. “Si eso es ser un hombre, yo no quiero serlo”.

En mi mente había una creencia: “tenía que ser más como una mujer para agradarlas a todas”.  Siempre me había llevado mejor con mujeres, ellas son más dulces y cariñosas. Como te puedes imaginar no me iba muy bien con ellas, me tomaban el pelo y no me respetaban.

Cuando empecé a organizar círculos de hombres era muy desafiante, estaba en tensión, como compitiendo con ellos. Poco a poco fui sintiéndome más cómodo, disfrutando de esos espacios, aprendiendo mucho de los otros hombres y de mí mismo.

Años después gracias, en gran parte a lo que aprendí en estos círculos, organizo talleres, retiros y círculos en todo el mundo, estoy casado con una mujer increíble que me admira y me respeta, vivo mi propósito y me acompañan hombres que me inspiran a ser más y mejor cada día.

Vivo una vida que algún día soñé con abundancia económica, un propósito que está cambiando el mundo y libertad para hacer lo que quiero y cuando quiero.

Mi intención ahora es compartir contigo todo lo que aprendí para tú puedas vivir una experiencia que te empodere como hombre y que te conviertas en un líder para tu comunidad y quizás algún día también poder vivir de compartir tu camino como hombre.

¿Quieres que te acompañe en esta aventura y formar parte de la mayor comunidad de hombres conscientes en español?